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17 de octubre de 2024

EL ARTISTA GRINGO QUE MEJOR ILUSTRÓ AL IMPERIO DE LOS INCAS

Louis S. Glanzman nació hace más de un siglo en EE.UU. pero sus pinturas sobre los incas siguen inspirando (y plagiando) sin recibir el merecido reconocimiento.

Roberto Ochoa Berreteaga


El gringo Luis S. Glanzman debe ser el artista plástico más plagiado en el Perú y el menos reconocido pese a que sus dibujos del antiguo Perú son replicados en museos, revistas, libros…. Sin respetar su valiosa autoría.


Pero aquí reconocemos el aporte de este dibujante cuya obra sirvió para que miles de jóvenes imaginaran el esplendor del Tawantinsuyo.



Glanzman nació el 8 de febrero de 1922 y falleció el 7 de julio de 2013. En su página web (http://louisglanzman.com/) lo identifican como “pintor histórico e ilustrador de libros”.

Nació en Baltimore, Maryland, pero radicó gran parte de su vida en Rockaway, Nueva York.

“El trabajo de Louis S. Glanzman se inspiró en las luchas de la vida, el amor amateur de su madre por la pintura y los grandes músicos del sur, ya que creció escuchando blues y jazz. Comenzó su carrera a los 16 años como ilustrador de cómics. En los años 40, trabajó como ilustrador en la revista Air Force. Durante los años 50, comenzó su carrera independiente como ilustrador de libros infantiles, creando el estilo de la siempre popular Pippi Calzaslargas”.



“Artista, ilustrador, historiador, narrador, visionario, reportero, siempre capturando notablemente el espíritu de la humanidad: así es Louis S. Glanzman”.

Sus pinturas se han exhibido en numerosas exposiciones de arte. También se hizo merecedor a numerosos premios y reconocimientos de organizaciones y publicaciones prestigiosas como la Society of Illustrators, Art Directors Club, Salmagundi Club, Wall Street Journal , New York Times y National Geographic Society.

Sus obras se exhiben en colecciones permanentes en muchos museos y galerías de prestigio como la Galería Nacional de Retratos, Smithsonian, Washington DC. Museo de Arte del Estado de Tennessee. Monumento Nacional, Columbus, Ohio. Fundación Histórica de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos. Museo de la vida en la Guerra Civil, Fredericksburg, Virginia. Sitka, Alaska. Teatro Ford, Washington, DC. Parque de la Independencia, Filadelfia, Pensilvania. Museo Astrid Lindgren, Suecia.

En el Perú, empero, nunca mereció un reconocimiento pese a que su obra ha sido reproducida y copiada de la manera más burda.


Ya sabemos del gran aporte de la National Geographic Magazine a la difusión del turismo e historia del Perú: Desde la fama de Machupicchu como “la ciudad perdida de los incas”, hasta el salvataje de la momia Juanita y el hallazgo de las tumbas reales del Señor de Sipán, entre otras. Pero la NGM también aportó valiosas publicaciones que, lamentablemente, no fueron traducidas para su masiva difusión en el Perú. Uno de esos libros es The Incredible Incas and their timeless land (los increíbles incas y su patria eterna) con texto y fotos de Loren McIntyre, y con las ilustraciones de Glanzman. El prefacio fue escrito por el peruano Eugenio Alarco.



El libro todavía se puede encontrar en colecciones privadas y en librerías de libros viejos. Yo tengo un ejemplar gracias al buen “Veguita”. La obra es toda una joya bibliográfica pues sus numerosas ilustraciones siguen siendo fuente de inspiración (hasta el plagio más descarado) a la hora de reproducir escenas cotidianas y épicas del antiguo Perú. Y debemos reconocer que hasta ahora no han sido superadas.




En su biografía oficial se puede leer que “el talento de LSG, junto con su precisión y puntualidad, le valieron numerosos encargos, incluidas portadas semanales de noticias de última hora para la revista Time . Entre 1966 y 1976 pintó más de 80 portadas, muchas de ellas terminadas en un plazo de 24 a 48 horas para cumplir con la impresión de la empresa. Durante ese tiempo, no era raro que sus cuadros fueran a imprenta con la pintura fresca.





La portada más desafiante de LSG fue capturar el evento histórico: la caminata de Neil Armstrong sobre la Luna . Sin ningún punto de referencia para pintar, la portada fue creada a partir de la visión reflexiva y el talento de Glanzman.



El enorme interés cultural de LSG lo inspiró par plasmar pinturas que incluyen óperas, hombres y mujeres de la Biblia, vida salvaje y escenas del océano. Pero el primer amor de Glanzman fue la historia. Este amor lo llevó de los campos de batalla y excursiones por todo el país hasta sitios arqueológicos internacionales para realizar investigaciones en profundidad. Muchas pinturas que representan culturas históricas se publican en libros de la National Geographic Society, como Mysterious Maya , The Mighty Aztecs , The Incredible Incas and Their Timeless Land , The Vikings y Clues to America's Past .




Aquí reproducimos todos los dibujos que realizó Glanzman para el libro The Incredible Incas… como un homenaje a la vida y obra de este artista gringo que inmortalizó escenas ficticias del imperio andino con un tono épico e hiperrealista.




Podrán comprobar que la pintura más plagiada es la “gran marcha” del ejército inca que desciende desde los contrafuertes andinos hasta las planicies costeñas. También resalto la escena de la capacocha o sacrificio de un joven en la cima nevada. Una escena que surgió de la mente del artista y que quedó comprobada muchos años después cuando Johan Reinhard (también de la National Geographic Magazine) rescató la momia de “Juanita” en el cráter del volcán Ampato, en Arequipa.



Otra escena de gran realismo es la del guerrero inca flechado por un “chuncho”, que representa el fallido ingreso de los cusqueños a la Amazonía. Una escena similar es la de los soldados incas capturados por los caníbales de la isla de Puna (frente al actual Guayaquil, en Ecuador). Se trata de una escena de gran realismo que, años después, inspiró una de las escenas más brutales del film Deer Hunter (El Francotirador, con Robert de Niro y Meryl Street) cuando se ve a los soldados del Vietcong que mantienen detenidos a soldados gringos en jaulas fluviales.



Otra ilustración que muestra la genialidad de Granzman (respeta hasta la escala y proporcionalidad de las naves) es la del primer contacto de una carabela de Pizarro, procedente de Panamá, con las balsas de los nativos en la desembocadura del río Tumbes. También me quedo con el asedio a Sacsayhuamán, que reproduce la ferocidad del enfrentamiento de los incas rebeldes comandados por Mano Inka contra los españoles recién asentados en Cusco. Los propios cronistas reconocieron el heroísmo y valor de Cahuide, el guerrerazo cusqueño que se inmoló antes de caer prisionero de los godos y de sus aliados andinos.



De todos estos dibujos, el más flojo puede ser el contacto de Hernando Pizarro con Atahualpa. La escena también está basada en las crónicas hispanas y respeta la indiferencia del soberano quiteño ante la prepotencia del caballero extremeño, pero lo muestra sentado en el piso y esa situación resulta poco menos que imposible considerando su categoría de dios andino.



Otro decir es la gran calidad de las fotografías de McIntyre, Me quedo con la de los cráneos procedentes de las tumbas saqueadas por los huaqueros en algún sitio arqueológico costeño bajo la imponente una llena… pero lo mejor es que usted, amable lector, compruebe la calidad de las ilustraciones. Y la próxima vez que vea estas obras reproducidas en museos y publicaciones, recuerde que el verdadero autor fue este artista gringo enamorado del Perú.





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