TORRE TAGLE RECARGADO
Muy buenas exposiciones en las cinco salas del su centro cultural Inca Garcilaso del ahora renovado palacio de Torre Tagle; en el Centro Histórico de Lima.
Texto y fotos de Roberto Ochoa Berreteaga.
Valió la pena esperar los trabajos de restauración en el frontis del palacio de Torre Tagle, sede de la Cancillería peruana. Si bien las instalaciones del centro Cultural Inca Garcilaso y salas de exposición nunca cerraron, las obras en el frontis le quitaban gran parte de su atractivo turístico.
Sus célebres balcones lucen ahora como nuevos y coincidió con varias exposiciones que vale la pena celebrar.
En el primer piso está íntegramente dedicado a la poeta Blanca Varela. En la sala izquierda, donde funcionaba hasta hace algunos años la librería El Virrey, está la exposición bibliográfica PUERTA ENTREABIERTA, con poemas, primeras ediciones y hasta la máquina de escribir a Varela. No podía faltar la edición de su primer poemario: Ese puerto existe. Como se sabe, se iba a llamar Puerto Supe, en homenaje a José María Arguedas, pero el título no le gustó a Octavio Paz y Varela le replicó: pero “ese puerto existe”. A lo que el premio Nobel mexicano respondió “ahí tienes su título”.
En la siguiente sala está la exposición ANIQUILAR LA LUZ O HACERLA, con obras de artistas plásticos y fotógrafos en torno a la poética de Blanca Varela. A decir de Carlo Trivelli “Varela preside sobre esta muestra de dos formas distintas. Por un lado, ella misma, como personaje, se hace presente a través de retratos que nos la traen de vuelta, con la mirada –a veces implacable, muchas veces esquiva- de quien ejerció la poesía como un acto privado, que se guarda de los demás con discreción, porque la sabía un ejercicio arduo y descarnado: el de quien lanza sus preguntas más secretas ante la sordera del mundo”. Y vaya que se hace presente e inmortalizada en las fotografías de Herman Shwarz y de Alicia Benavides; o en los lienzos de Johanna Hamann y Julia Navarretea; o en las esculturas de Nani Cárdenas y Silva Westphalen.
En el segundo piso del CC Inca Garcilaso hay tres exposiciones… pero lo primero es detenerse a mitad de la escalera para gozar ese inmenso mapa que muestra los diversos pisos ecológicos del Perú en un perfil que quiso ser técnico (para su época) pero derivó en toda una obra de arte.
En la primera sala está la exposición ADELINA Y AMADOR, con fotografías de Jeannine Ferrand, dedicado al entorno familiar del violinista y danzante Amador Ballumbrosio.
Al frente la pequeña exposición NOTAS BIBLIOGRÁFICAS, de la National Museum of woman in the arte; y en la sala más grande la sobrecogedora muestra LUZ DE OJO, con ensayos fotográficos de documentales peruanos contemporáneos. Imperdible.
