
LA SEGUNDA COFRADÍA DE CHAUTE CUMPLE 90 AÑOS
Una navidad diferente en las serranías de Lima, con flores de amancaes y los ritos y tradiciones de Huarochirí.
Por Lina Godoy Encarnación (*)
Hace casi un siglo, en diciembre del año 1935, un grupo de jóvenes de La Merced de Chaute (en el distrito de San Bartolomé, en Huarochirí) se alista para su celebrar su Pascua Navidad. En la víspera habían fundado la Segunda Cofradía del Niño Dios para celebrar la navidad tal y como le enseñaron sus ancestros, con la danza de los Negritos y vistiendo su cotona: un sombrero con plumas y cintas de colores; con el pañuelo en una mano y su campanilla en la otra.

Años después, esos jóvenes “Negritos” se casaron y danzaron con sus “mariquías” al ritmo del “Pachahualay”, que significa DESPEDIDA. Ellas, elegantemente vestidas con sus mandiles amarillos con cintas bordadas, del mismo color de la flor de Amancaes; y su Shicra, una bolsa tejida a mano con la fibra de maguey, teñida con tintes naturales. También lucen su pañuelo y su sombrero.
Cabe resaltar que la Negrería en Huarochirí se caracteriza por ser ejecutada por hombres y las Mariquías son las damas que se incorporan en esta festividad que se realiza en esta parte de la sierra limeña.


Volviendo a nuestra historia, esas parejitas bailaron más de setenta años, siempre en su Chaute natal, del 24 al 28 de diciembre. Encapsularon tan bien su danza que ver a las Mariquías, era un lujo cada tres años. Sin embargo, ya no bailaban solo las esposas, sino también las hijas, las nietas, las nueras, etc. Sus mudanzas, su canto, su prosa y su alegría enamoraban al público foráneo que llegaba a verlas y más cuando recibían de sus manos la hermosa flor de Amancaes con su excepcional aroma.


Pero las cosas cambiaron en el siglo XXI. En el 80° aniversario (2015) de la Segunda Cofradía de Chaute, los descendientes decidieron romper el cascarón, salir de Chaute y difundir su tradición en Lima y provincias. Participan ahora en eventos culturales y folklóricos, recibiendo la admiración y los aplausos del público especializado, con fotos, publicaciones y hasta selfis para sus redes sociales. Las cosas habían cambiado.

En el 2023, llegaron al Ministerio de Cultura donde los reconocieron como Punto de Cultura y parte del Registro Nacional de Trabajadores y Organizaciones de la Cultura y las Artes (RENTOCA) porque el concepto de esta institución compromete a niños, adolescentes, jóvenes, adultos y adultos mayores, además de la conservación de la flor de Amancaes que está en peligro de extinción.

Ahora, que ya van a cumplir 90 años de fundación, los herederos alistan su celebración en Chaute. En diciembre próximo realizarán el tradicional REQUERIMIENTO, que es el anuncio de su fiesta en el 2025 y la presentación de sus CAJUELEROS y DEVOTOS, quienes fieles a su devoción al Niño Jesús darán qué hablar. Alisten unas buenas botas para la lluvia porque la alegría y la danza la ponen los Negritos y sus Mariquías de la Segunda Cofradía de Chaute.
(*) Presidente de la Segunda Cofradía de Chaute.
